lunes, 27 de febrero de 2017

Capítulo 75: LOS DESCUBRIMIENTOS DE MARTÍN

Vio en el estante superior, lo que era su más valiosa posesión, el avión a control remoto que su padre le había regalado antes de irse.
_ Encontré algo_ dijo Flor distrayendo su atención
Avanzó en dirección a ella, vio una pequeña caja de madera que la mujer sostenía en sus manos. En el interior había diversas fotografías y dibujos. Fotos de esa mujer y su padre besándose.
_ ¿Es tu mamá?_ cuestionó ella
_ No, no lo es_ respondió molesto
Después otra foto de esa mujer, su padre y una bebé. Vio debajo un dibujo infantil de una niña y su padre, debajo estaba escrito con crayolas. “Te quiero papá. Atte: Mariza”
_ Mi papá tenía otra familia_ dijo sorprendido
_ Tincho…
_ ¡Por eso se fue!_ gritó enojado _ ¿Te diste cuenta que el diario en el que anunciaban su muerte era español?... ¡él se fue a España!... Y mira lo que tiene escrito esta foto al reverso_ dijo apuntando _ ¡Madrid, España!... Me abandonó para irse con ellas_
Para ese punto le era imposible detener las lágrimas. Su padre, su héroe, se desmoronaba rápidamente.
Sintió que Florencia lo abrazaba, quiso alejarla, pero finalmente terminó devolviéndole el abrazo.
_ Debe haber otra explicación_ le dijo ella
_ ¡No la hay!... ¡Tuvo otra hija y se fue a vivir con ella!_ exclamó con lágrimas en los ojos _ Vámonos_ dijo saliendo del lugar.
Subió al auto sintiendo como su mundo entero se desmoronaba, estaba tan acabado como su vieja casa.

Se encontraban en la cafetería sentados, comiendo juntos. Rodeados por el barullo de los estudiantes que comían su almuerzo y les ayudaba a ignorar el incómodo silencio que existía entre ellos.
_ Tendremos que hablar de esto en algún momento_ comentó Sara
Lo sabía, pero no tenía idea de cómo empezar o qué decir.
_ Lo sé, pero justo ahora no quiero hablar del tema_
_ Es raro que estemos comiendo juntos, ¿No?_
_ Iré con Chaim_ concluyó levantándose de la mesa

 El camino fue completamente silencioso. Se detuvo frente a un local de comida.
_ Tincho, lo lamento_ dijo mirando al niño
_ No importa_ respondió indiferente
_ Vamos a comer un poco_ le indicó
_ Flor, en verdad no quiero_ respondió con tristeza _ ¡No puedo creer que mi padre tuviera otra familia!_
Desabrochó su cinturón de seguridad y se inclinó para abrazarlo.
_ Te invito una hamburguesa, ¿Si?_
El niño asintió y finalmente bajó del auto.
Se sentaron en una mesa, en un restaurante a la orilla de la carretera.
_ ¿Quiere hablar?_
_ Creo que no… ¡Mi papá era mi héroe!... ¡Ahora no es un héroe y tampoco está vivo!_ exclamó al borde del llanto
_ Quizá no conoces la historia completa, podemos volver a la casa de tu padre y…
_ ¡No quiero saber nada más!_ dijo limpiando las lágrimas con su suéter _ Por favor, promete que no le dirás a nadie_
_ Te lo prometo, solo si respondes una pregunta_
_ Bien_ respondió resignado
_ ¿Por qué el aprendiz de Mau tiene toda esa información sobre ustedes?_
El niño sorbió de su malteada.
_ Somos enemigos… solo quiere fastidiarme_
_ ¿Mau lo sabe?_ preguntó
_ No, ¿Puedes guardar ese otro secreto?_ pidió dando la primera mordida a su hamburguesa
_ Tincho, lo lamento, pero no puedo… Mau debe saber de esto… ¡No está bien que ese sujeto tenga toda esa información de ustedes!... ¡Es extraño!... Y sinceramente me hace pensar que el sujeto es peligroso_
_ Solo es fastidioso_ comentó el niño

La observaba jugar, era sin duda la mejor de todo el equipo. Seguramente el próximo año se convertiría en la capitana. Él la esperaba como hacía siempre, se sentaba en las gradas a ver el entrenamiento.
Le gustaba ver como pasaba hábilmente el balón a sus compañeras, como detenía los pases y la forma en que dominaba el balón esquivando a sus contrincantes.
El silbato del entrenador sonó y vio a las chicas dispersarse. Ella era la más linda del equipo. Sonrió y se puso de pie para alcanzarla.
Su sonrisa se borró al ver que Matías acercarse a ella. Los vio conversar y tuvo deseos de asesinar al chico de los ojos verdes.
La estaba perdiendo y no estaba dispuesto a perderla sin luchar.

Regresaron al Royal. Cuando se estacionó, ella volteó a verlo. Ese había sido un día muy extraño para él, aún estaba procesando la muerte de su padre e intentaba asimilar el hecho de que tenía una media hermana en algún lugar de España. 
Desabrochó su cinturón de seguridad y simplemente la abrazó con fuerza.
_ Gracias_ dijo en voz baja
_No hay de que_ respondió ella estrechándolo con fuerza
Ese día había hecho muchos descubrimientos, pero el más importante sin duda era que Flor no era tan terrible como pensaba.

Los tres chicos se encontraban sentados en las escaleras del Royal en mitad de la tarde compartiendo un refresco. Intentaba mantener la paz entre sus dos amigos, aunque no parecía tan sencillo como esperaba.
_ ¡Solo ve y habla con ella, riquillo!_ exclamó Arturo
_ No me molestes_ respondió el rubio
_ ¿Podemos volver a mí?_ los interrumpió _ Kía me dijo que está bien que salgamos con otras personas… ¡Es obvio que está interesada en otro!_
_ ¡Eres un completo idiota!_ exclamó el quinceañero _ ¡Kía se está haciendo a un lado para que salgas con otra chica!_
_ ¿Qué chica?_ preguntó confundido
_ Cande, ¡Ella está enamorada de ti!_
_ ¿Qué?_
_ Ella me lo dijo, ¡Está enamorada de ti!... Es por eso que discutí con ella, me harté  de escuchar sus historias románticas y actuar como su amigo_ explicó dando un trago a su refresco
_ ¡A mí no me interesa Cande!, ¡Es mi amiga!_
_ ¿Qué creen que debería de hacer?_ interrumpió Leonardo
_ ¡Habla con ella!_ gritaron Arturo y él a la par

Le llevó toda la tarde, pero al fin había logrado armarse de valor. Se encontraban juntos en el lobby del hotel realizando su tarea de matemáticas en compañía de Oscar. Y lo primero que tenía que hacer era deshacerse del hermano molesto.
_ ¿Estrella está saliendo con el aprendiz?_ preguntó señalando a la mujer de la recepción
_ Creo que si… Supongo que está bien, Mau está de nuevo con Flor_ respondió Emi
_ ¿Aún prepararemos esa cena romántica para ellos?_
_ Si, sin duda será grandiosa_ sonrió ella
Al instante escuchó que el cuaderno de Oscar se cerraba.
_ Terminaré mi tarea arriba_ dijo el chico
Sonrió. Lo había logrado.
Al fin estaban solos. Ese era el momento.
_ Emi_
Ella volteó a verlo, sintió que sus manos sudaban y que el corazón le latía a máxima velocidad.
_ ¿Quieres ir al cine mañana?_ preguntó
_ Seguro, ¿Puedo invitar a Os?_
_ Emi, no te estoy invitando como una salida de amigos, ¡Es una cita!_
_ ¿Una cita?_ preguntó confundida
_ ¡Si!, ¡Decidí que no me rendiré!... Entonces, ¿Qué dices?_  



lunes, 20 de febrero de 2017

Capítulo 74: VIAJE AL PASADO

_ Esta es la suite de Rodrigo_
_ Gracias por la información obvia_ respondió sarcástico mientras avanzaban por la sala
Tomó al niño por los hombros, lo hizo dar media vuelta y se hincó para poder verlo frente a frente.
_ ¿Qué haces entrando aquí?... Pensé que Mau había hablado contigo para que dejaras de entrar a sitios sin permiso_
_ ¡No te metas!_ volvió a exclamar _ ¡Vete, este no es asunto tuyo!_
Martín se liberó y siguió con su camino. Ella lo siguió.
El niño avanzó a la que había sido su habitación, abrió la puerta y entonces se encontraron con una gran sorpresa. Las paredes del cuarto se encontraban tapizadas por cientos de fotografías y recortes de periódicos.
Se acercaron a observar, pronto se dio cuenta que toda esa información era sobre los chicos, información sobre Sara, Arturo, Oscar, Emilia, Paula, Lucía y Julián, pero sobre todo de Martín.
_ ¿Qué es todo esto?_ preguntó
_ Tiene que ser mentira_ escuchó que decía Martín
Se acercó a él y entonces vio la terrible noticia que leía el niño. “Cae avioneta en mitad del océano. Piloto muere”
Leyó la nota. Después notó como los ojos del niño se llenaban de lágrimas, en automático lo rodeo con el brazo.
_ ¡Es mentira!, ¡Mi papá no puede estar muerto!_ gritó enojado
_ ¿Es él?_ preguntó señalando una fotografía
_ S-s-s-si_ respondió _ Pero… ¿Quiénes son ellas?_
En la fotografía aparecía el padre de Martín al lado de una mujer y cargando a una niña de unos cuatro años que sonreía divertida.
_ Tincho, tenemos que irnos_ dijo abrazándolo _ No podemos estar aquí_
El niño asintió en silencio.
Salieron de la suite sin decir una sola palabra.
_ ¡No le digas nada de esto a nadie!_ exclamó Martín
_ Pero, Tincho…
_ ¡Martín!_ gritó _ ¡Y te pido que guardes este secreto como hiciste con el secreto de Arturo y con la identidad del enano!_
Una vez más esa punzada de culpa. Seguramente por eso terminó accediendo.

Estaba en su cuarto revisando las cuentas, con su empleo no sería capaz de continuar pagando la renta de la suite. Pero esa era la menor de sus preocupaciones, le estaba costando más de lo esperado el lidiar con tres adolescentes, especialmente cuando dos de ellos pasaban gran parte del día peleando.
_ La cena está lista_ le informó Arturo
Lo siguió hasta el comedor, donde los hermanos Lagos se encontraban ya sentados.
_ El callejerito cocinó, espero que no nos enfermemos_ comentó Leonardo
_ Al menos se cocinar y no tengo que ocupar diario el servicio al cuarto_ respondió el quinceañero
_ ¿Podrían solo sentarse y comer?_ dijo Ezequiel con fastidio
_ Solo tomo mis precauciones… Me preocupa una infección estomacal_ dijo Leo
_ Deberías preocuparte por arreglar las cosas con Sara_ contraatacó Arturo _ ¡Ve y habla con ella!_
_ ¡No te metas en mi vida, callejerito!_ gritó Leo _ Sigue molestando y te romperé el otro brazo_
_ Aun con el brazo roto, puedo hacerte papilla, riquillo_
Los dos adolescentes se encontraban con miradas retadoras y a  punto de atacarse entre ellos.
_ ¡Basta!, ¡Vayan los dos a su cuarto!_ exclamó ella completamente harta de sus peleas

A la mañana siguiente ella se ofreció a llevar a los chicos a la escuela. Apenas cabían en su auto, por suerte Mau le había prestado el suyo.
_ ¿Cómo van las cosas con Leo?_ le preguntó a Sara que viajaba en el asiento del copiloto
_ No quiero hablar de ello_ respondió la chica
_ Entiendo… Llegamos chicos_ indicó aparcando frente al colegio
Ellos empezaron a bajar.
_ Tincho, espera_ dijo antes de que el niño se alejara
_ ¿Te esperamos?_ preguntó Lucía
_ Adelántense, tengo que arreglar un asunto con Tincho_ les indicó
Ellos se encogieron de hombros y entraron al colegio.
_ ¿Qué quieres, bruja?_ dijo con fastidio
_ Sube al auto_
Hizo una mueca y subió al asiento del copiloto.
_ Ahora, vámonos_
_ ¿Estás loca?... ¡Tengo que ir a clase!_
_ Sé que no irás a clase hoy… Planeas ir a la vieja casa de tu padre_ comentó poniendo el auto en marcha _ Así que yo te llevaré_
_ ¡Bájame de aquí, bruja!... ¡Yo pensaba ir a clases!_
Volteó a verlo.
_ ¿Cómo lo supiste?_ cuestionó el niño
_ Eres muy obstinado, y te encanta investigar… Mira prefiero acompañarte y asegurarme que estarás bien a que le mientas a Mau y te metas en problemas_ explicó
Martín se encogió de hombros y se acomodó en el asiento.

Conocer los sentimientos de su amiga por su exnovio había despertado en ella sentimientos encontrados, quería a Chaim, eso era imposible de negar, pero no podía estar con él, esa era otra verdad contundente. Quizá debería dejarlo ir.
Aprovecho el cambio de clase para hablar con él.
_ Chaim… solo quiero decirte algo_ comentó armándose de valor
_ ¿Quieres volver conmigo?_ preguntó ilusionado
_ ¡No!... Solo quería decirte que tal vez es momento de que empecemos a salir con otras personas_ dijo con seguridad _ Así que si alguno de los dos tiene una cita, está todo bien_
_ De acuerdo_ respondió con extrañeza
Sin duda sus sentimientos por él seguían ahí, lo supo al descubrir que deseaba besarlo justo en ese momento. Pero se detuvo, ese joven y apuesto príncipe no era para ella.

Después de hora y media de viaje y varias vueltas equivocadas, finalmente llegaron a su antigua casa.    Le parecía completamente extraño estar nuevamente ahí, no había regresado desde aquella ocasión en la que huyó de los del consejo tutelar.
_ ¿Es aquí?_ preguntó ella
Asintió.
Solo que esa casa no parecía estar bastante descuidada. ¿Tanto se había deteriorado su hogar en 3 años?
_ Parece un poco descuidada_
_ La idea de una casa de madera le encantaba a mi padre… creo que no fue su mejor idea_ explicó bajando del auto
Corrió a la entrada y buscó en una vieja maceta con una planta completamente marchita. Sacó una llave y abrió la puerta.
El interior de la sala era obscuro y se encontraba inundado de un penetrante aroma a humedad. Los muebles seguían ahí, pero todo se veía mucho más tiste.
_ ¿Qué es lo buscamos exactamente?_ cuestionó ella
_ Pistas. Quiero saber quiénes son las personas de la fotografía_ dijo subiendo las escaleras a toda prisa.
Entró a su cuarto, encontrándose con todos esos viejos recuerdos. Sus juguetes de infancia y sus tarjetas de baseball que su padre le había regalado.
_ ¿Juegas baseball?_ le preguntó Flor señalando un bate y un guante
_ Si, mi padre me enseño… Pero hace años que no lo practico_
Tomó ambos objetos y salió de ahí. Cruzó el pasillo para llegar al cuarto que era de su padre. Desde su partida, no había entado ahí… consideraba esa habitación como un sitio sagrado, pero ahora quería respuestas.
_ Ayúdame a buscar cualquier cosa que pueda darme información de esas personas_
Comenzaron a buscar. Estaba profanando ese lugar sagrado, si su padre realmente había muerto, necesitaba conocer todas las respuestas posibles.
Vio en el estante superior, lo que era su más valiosa posesión, el avión a control remoto que su padre le había regalado antes de irse.
_ Encontré algo_ dijo Flor distrayendo su atención
Avanzó en dirección a ella, vio una pequeña caja de madera que la mujer sostenía en sus manos. En el interior había diversas fotografías y dibujos. Fotos de esa mujer y su padre besándose.
_ ¿Es tu mamá?_ cuestionó ella
_ No, no lo es_ respondió molesto
Después otra foto de esa mujer, su padre y una bebé. Vio debajo un dibujo infantil de una niña y su padre, debajo estaba escrito con crayolas. “Te quiero papá. Atte: Mariza”

_ Mi papá tenía otra familia_ dijo sorprendido