viernes, 7 de octubre de 2016

Capítulo 45: FAMILIAS

_ O ustedes podrían visitarnos, la casa es bastante grande, podrían pasar ahí algún fin de semana_ respondió audaz la tía de Lucy _ Me gustaría hablar con usted después de cenar_ le dijo a Mauricio_
Sin duda esa sería una larga noche para la familia.

Después de la cena y esas sorpresivas noticias, Arturo se encontraba completamente confundido, aturdido por lo ocurrido aquella noche. Leonardo y Sara tampoco sabían que hacer. Se encontraban los tres en completo silencio en el cuarto de Leo.
_ Va a tener otro hijo_ susurró Arturo casi para sí mismo
_ ¿Por qué no le dijeron la verdad a Tomás?_ preguntó Sara
_ ¡Va a tener un hijo!_ exclamó el quinceañero poniéndose de pie de golpe _ ¿Cómo puede tener otro hijo?_ se dejó caer sobre la cama de Leonardo
_ Parece que ahora seremos familia_ comentó el chico rubio sentándose a su lado
_ Hablaré con ella. No puedo desmentirla frente a tu tío o se marchará y quién sabe que pase con ese bebé… así que la enfrentaré en privado_
_ Sabes que te apoyo en lo que necesites_ dijo Sara colocándose a su lado
_ Y conmigo, ese niño será mi primo y debo cuidar a la familia_ añadió Leo

Agustín y Florencia se encontraban abrazados en la sala del apartamento viendo una película, se sentían completamente a gusto estando juntos. Como si ese siempre hubiera sido su destino.
_ ¡Mami!, ¡Mami!_ los interrumpió la voz infantil de Julián _ ¡Mami!_ volvió a chillar
Flor se levantó para dirigirse al cuarto de su hijo adoptivo, aun le resultaba extraño haber tomado ese rol, pero lo cierto era que le había tomado mucho cariño a ese pequeño. Entró al cuarto de Julián, lo encontró sentado sobre su cama, agitado y sudado.
_ ¿Estás bien, enano?_ preguntó encendiendo la luz y sentándose junto al niño
_ Tuve una pesadilla_ respondió agitado
Agustín entró también al cuarto del infante, acercándose a Flor.
_ ¿Todo bien?_ preguntó acariciando el cabello de Julián
_S-s-s-s-i-si_ respondió tocando su cuello en búsqueda de su dije, pero no lo encontró _ ¡Mi cadenita no está!, ¡Mi dije!, ¡Perdí mi dije!_ exclamó el niño preocupado
_ Calma, enano. Seguramente se te cayó aquí adentro_ intentó tranquilizarlo Flor _ Vamos a buscarlo, ¿Ok?_
Julián salió de su cama para empezar a buscar ese objeto tan valioso para él.

 Los chicos se habían marchado a dormir, incluso Arturo, Emi y Sara que habían regresado de su cena en la suite de los Lagos. Ahora solo se encontraba él con los tíos de Lucía sentados a la mesa.
_ Le agradecemos mucho que la cuidara_ comentó la señora Pérez _ Pero estará mejor con nosotros_
_ ¿Qué cosa?_ preguntó Mauricio confundido
_ Usted tiene a su cargo a demasiados chicos y seamos sinceros, no tiene los suficientes recursos para mantenerlos a todos_ respondió el tío de Lucía _ Con nosotros no le faltara nada_
_ Ella es feliz aquí_
_ ¿Por cuánto tiempo?_ insistió el hombre _ ¿Ha pensado en que pasará cuando sus chicos estudien la universidad?, ¿Cómo los mantendrá a todos?_
Mau no contestó. Nunca lo había visto de esa forma.
_ Si sabe lo que es mejor para Lucía. Pasaremos mañana por ella_ concluyó la mujer poniéndose de pie.

Florencia levantó al niño en brazos, dispuesta a llevarlo nuevamente a su habitación. Pasaba ya de la media noche. Ellos habían buscado por todo el apartamento la cadenita de Julián sin tener éxito. Finalmente el pequeño se había quedado dormido llorando.
_ Tenemos que seguir buscando_ dijo Flor colocando a su hijo sobre su cama
_ ¿Por qué es tan importante ese dije?_ preguntó Agustín cubriendo al niño con una manta
_ Es lo único que tiene de sus padres_ colocó el osito de peluche junto al pequeño _ Te prometo que la encontraremos_ susurró acariciando el cabello castaño del infante.

Esa mañana Guillermo se encontró con un panorama poco usual para una mañana de domingo en la suite de su mejor amigo. Cuando entró no se encontró con Mauricio preparando el desayuno para los chicos, sino que lo encontró sentado a la mesa, con la mirada pérdida en el infinito.
_ ¿Qué tienes?_ preguntó tomando asiento junto a su amigo
_ Los tíos de Lu tienen razón, estará mejor con ellos_ respondió con tristeza
_ ¿Qué te ha dicho Estrella sobre esto?_
_ Nada, no lo he hablado con ella_ dijo sin mucha importancia _ Sé que es lo mejor para ella, pero no quiero que se vaya… ella me lo pidió_ lanzó un suspiro _ Debo hablar con ella_ concluyó poniéndose de pie

La mañana se sentía tan vacía sabiendo que ella no vendría a verlo. Su mágica historia de amor había terminado, justo cuando él pensaba que sería para siempre. Kía ya no era más su novia. Se levantó y tomó el teléfono, tenía una importante llamada que hacer.

La medallita no apareció nunca, por más que buscaron en cada rincón del apartamento. Estaban cansados y desvelados, pero decididos a levantarle el ánimo a Julián, por lo cual le dijeron que lo llevarían a practicar un poco en el parque. El niño se encontraba cambiándose en su habitación cuando tocaron a la puerta.
Agustín abrió inmediatamente, solo para llevarse una gran sorpresa al darse cuenta quien se encontraba al otro lado del umbral.

La niña lloraba de forma desconsolada mientras escuchaba a su tutor decirle las múltiples razones por las cuales sería mejor que se mudará con sus tíos.
_ Yo no quiero ir_ se quejó entre llantos
_ Es lo mejor para ti_ dijo Mauricio con firmeza _ Estarás mejor con ellos_
_ ¡No!_ gritó poniéndose de pie _ ¡Yo no me iré de aquí!_ concluyó saliendo de su cuarto
Mauricio se puso de pie, listo para seguirla
_ ¡Lu!_ exclamó al tiempo que Estrella entraba al cuarto de las chicas
_ ¿Qué pasa?_ preguntó confundida
_ Te explico después, tengo que ir con ella_ concluyó Mau sin prestarle mayor importancia a su novia
Una vez más, Mauricio la dejaba de lado de su vida y la de los chicos. <<Quizá era mejor cuando no éramos novios>> pensó Estrella dejándose caer sobre la cama de Sara.

El quinceañero avanzó con paso firme hasta alcanzarla en mitad del pasillo, tenía que hablar con su madre antes de que algo se saliera de control, quizá podría llegar a un acuerdo con ella.
_ Tengo que hablar contigo_ dijo avanzando a la par de ella
_ Yo no_ respondió fríamente mientras llamaba al ascensor
_ ¿Vas a tener otro hijo?_ preguntó cuándo las puertas del elevador se abrieron frente a ellos
_ Voy a tener UN hijo_ lo corrigió entrando
Las puertas se cerraron nuevamente, dejando a madre e hijo en el interior. Completamente solos.
_ No tengo nada de qué hablar contigo_
_ ¡No quiero que le hagas a ese bebé lo mismo que a mí!_ exclamó el chico _ Si vas a tener otro hijo….
_ Tendré UN hijo_ volvió a corregirlo
Llegaron al lobby, ahí no podían seguir hablando, por lo cual, Arturo se limitó a seguirla hasta la entrada. Chaim la esperaba ya con su auto listo para que saliera.
_ No irás a ninguna parte hasta que hablemos_ sentenció Arturo
Esmeralda no le hizo ningún caso, subió a su auto y giró la llave para encenderlo. El muchacho, completamente furioso ante la actitud de su madre, avanzó al frente del coche, colocó sus manos sobre el cofre y miró a la mujer que se encontraba en el interior directamente a los ojos.
_ No te irás sin hablar conmigo_ dijo con firmeza el quinceañero
Entonces Esmeralda soltó el freno y pisó el acelerador de su auto….



Nota: sé que me he ausentado mucho, lo cierto es que me falta tiempo para hacer todo lo que quiero y tengo que hacer.
Aprovecho para informar que nos acercamos a la mitad de la temporada (Capítulo 60) donde haré un pequeño corte, apenas estoy escribiendo la segunda mitad y quiero hacerlo bastante bien... También si tienen alguna sugerencia, o quieren saber algo, estoy abierta a escuchar sus comentarios, sin más por el momento, me despido. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario