Capítulo 124: EL ÚLTIMO DÍA DEL AÑO

_ Bueno… ¡Agustín!... ¿Se puede saber dónde estás?, Julián te espera desde navidad… Además, no lo habías llamado. ¿Acaso no te preguntabas cómo se encuentra después del susto que nos pegó César?_ comenzó a cuestionar apenas escuchó a su mejor amigo

_ Si, está bien. Ahora está dormido_ dijo mirando a su hijo

El niño había pedido dormir con ella esa noche.

_ Agus… responde una cosa, ¿Te fuiste por Cristián?_ preguntó

Apenas escuchó la respuesta, quedó completamente petrificada.

Despertó, ese era el último día del año. Esa noche sería la fiesta de fin de año y solo un par de días después llegaría la fecha que tanto temía: su cumpleaños.

Se levantó y salió de aquella habitación. Llevaba dos días quedándose en la suite de los Lagos y había algo que lo inquietaba bastante: en todo ese tiempo no se había cruzado con Esmeralda.

_ ¿Dónde está tu mamá?_ preguntó al ver al quinceañero preparando el desayuno

_ Ya se fue… solo vino a bañarse y se fue… está muy ocupada últimamente_

Asintió. Aunque realmente le parecía extraño que no hubiera visto ni siquiera el auto de la señora Esmeralda en muchos días.

_ Parece que su trabajo es muy absorbente… Arturo, llevo un par de días aquí y me parece tan raro que tu mamá nunca esté_

_ Tú siempre nos alimentas, hoy nos toca a nosotros_ comentó Ezequiel entrando a la cocina acompañado por Emi

_ ¿Desayuno para cinco?_ cuestionó Emilia

_ Cuatro, el riquillo ya se fue_ dijo Arturo

_ Que extraño que Esmeralda y Leo trabajen en fin de año, ¿No?_

_ ¿Si te contamos un secreto prometes no contarlo?_ preguntó el menor de los Lagos mirándolo a los ojos

_ Si, lo prometo_

_ ¡Otro más!_ exclamó Arturo

_ Si, otro más_ repitió Ezequiel _ Mira… Esmeralda se fue hace… algún tiempo. Mi hermano y Arturo intentan mantener las apariencias y que nadie se entere… Ahora estás viviendo con nosotros, así que esperamos que nos ayudes a mantener el secreto. Además, en un par de meses necesitaremos ayuda para pagar una renta y quizá puedas ayudarnos_

Se encontraba completamente emocionada, esa misma noche serían testigos de la propuesta de matrimonio de Franco a Alma. Justo en ese momento se encontraban dando los últimos toques a la decoración del salón y planeando los últimos detalles.

_ Ya quiero que empiece la fiesta, Alma estará muy contenta… y al fin dejaré de ocultarle el secreto a Nico, es muy complicado no contarle_ comentó Paula

_ Me imagino, con lo enamorada que estás de él_ bromeó

_ ¡No!, ¡Nico es mi mejor amigo!... Aunque hay alguien que creo que me gusta un poco_ confesó su pequeña amiga

_ ¿Quién?, ¡Cuéntame todo, enana!_

_ Lo conocerás esta noche, lo invité a la fiesta_ sonrió Paula

_ Todo listo, Sandra_ dijo Olivia acercándose a ellas

_ Sara_ la corrigió

_ Cantaré justo a las 11:30… A la hora de la propuesta_

Se contuvo un poco, detestaba a aquella rubia, pero les estaba ayudando y quería ayudar a Franco con ese momento tan importante.

_ Voy a hacer la prueba de sonido_ comentó avanzando hacia el escenario

_ ¡La odio!_ dijo entre dientes

_ No le des importancia, el riquillo tiene ojos solo para ti_ la tranquilizó Pau

Pero no era solo su relación pasada con Leonardo lo que le molestaba de aquella chica, sino que detestaba su forma de dejar en claro su superioridad en todo momento.

Irían al hotel desde temprano para ayudar con los preparativos de la fiesta. Desde la llamada de Agustín unas noches atrás, no estaba del todo tranquila.

_ Mamá… Vámonos_ dijo Julián tomándola del brazo

_ Si, si, enano… Ya voy_

_ ¿Qué tienes, ma?_ preguntó el pequeño observándola

Sintió miedo y tristeza al verlo. Ese niño era todo para ella, no quería perderlo, no quería que nada le pasara.

Se colocó en cuclillas para estar a la altura del infante y lo abrazó con fuerza.

_ Ma, ¿Qué pasa?_ insistió Julián

_ Pasa que te quiero mucho, hijo_ respondió abrazándolo con más fuerza

_ Y yo a ti, mami_ dijo el niño _ Ma, ¿Agus va a volver algún día?... Lo extraño_

_ Enano, él va a regresar, ¡Te lo prometo!_

Era casi medio día, ahora que Chaim conocía su secreto se encontraba más tranquilo, le gustaba saber que contaba con una red de apoyo.

_ Quiero hablar contigo_ dijo Arturo entrando a su habitación

_ ¿Qué pasa?_

_ La verdad es que me tienes muy sorprendido… Creo que a pesar de que eres el más joven, eres quien ha manejado de manera más madura todo este asunto_

_ Bueno, tú y Leo no son los más maduros del mundo_ comentó  

_ Si… supongo, no sé… Eze, de verdad me has ayudado un montón… sé que parecerá extraño pero te considero como mi hermanito, a pesar de que tu verdadero hermano no me agrade demasiado_

_ La verdad es que yo también te considero como un hermano mayor… Y como hermano mayor, quizá me puedas dar un par de consejos con las chicas_ dijo

_ No soy el mejor para aconsejarte en ese tema, pero puedo escuchar tu historia de amor… ¿No es con Emi, cierto?_

_ No, no… Emi y yo somos amigos, bueno, mejores amigos… pero ese es tema aparte… Me gusta una chica mayor_ explicó

_ Entonces no me pidas ayuda, las chicas mayores me quieren lejos de su vida_

_ ¿Pasó algo con Cande?_

_ Larga historia, pero ahora no importa… mejor vamos a concentrarnos en la fiesta de hoy… el señor Palacios me pidió que cante algo antes del conteo de media noche_

Faltando solo unas horas para el fin del año, los ánimos de los chicos aumentaban, dentro de la suite, veía a todos corriendo de un lado a otro buscando que sus atuendos estuvieran perfectos para la fiesta.

Él los observaba entusiasmado, ese ánimo desbordado, lo hacía sentir joven nuevamente. Definitivamente la idea de adoptar a alguno de ellos, era excelente.

_ ¡Dame eso!_ exclamó Martín arrebatando su corbata de las manos de Paula

_ Si igual te ves horrible_ reprochó la niña

_ ¿Para qué quieres tú una corbata?_

_ Para que Kía me vea guapo… ahora que no está con el principito, tengo que ponerme las pilas y alejarla de El Lobo_

_ ¿Kía es la amiguita con la que siempre estás?_ preguntó curioso

_ No, esa es Nadia… Kía es una amiga nuestra, mucho mayor que este_ dijo Paula con desprecio _ Además, no entiendo porque dejó a Chaim… ¡Es un divino!_

Sonrió, le pareció demasiado tierno que ellos estuvieran interesados en personas mayores.

_ Busquen a alguien de su edad_ comentó Emi

_ ¡Listo!, invité a un chico a la fiesta… no es tan lindo como Chaim, pero me gusta_

_ ¿Qué cosa?_ exclamó Mau

_ Ya lo van a conocer_ dijo Paula _ Ahora voy a arreglarme para esta noche_ concluyó entrando a su habitación

_ ¡Me van a volver loco!_ comentó Mauricio _ Ustedes dos, vayan a arreglarse_ indicó señalando a Martín y Oscar

_ Es tan divertido estar aquí_

_ No tanto, es complicado cuidarlos a todos… ya lo verá_

Esperaba tener la oportunidad de verlo, de darse cuenta lo que se sentía ser parte de una vida familiar.

Estaba nervioso, no entendía porque el señor Fernández los había mandado llamar. Generalmente él no era solicitado en las reuniones de aquella familia, muy a pesar de que Arturo y Ezequiel estaban siempre en la suite con los chicos.

_ Tomen asiento_ les indicó el señor Fernández

Le sorprendió ver a Florencia al lado del gerente del hotel.

_ ¿Quieren hablar sobre la fiesta de hoy?_ preguntó Ezequiel

_ Algo así chicos_ comentó Flor

_ En realidad hay un tema que queremos tratar con ustedes hace algún tiempo_ dijo Mauricio