miércoles, 2 de agosto de 2017

Capítulo 102: OFRENDA DE PAZ

_ Bien, entonces llevaré a Paula y a Oscar… ¡Esta noche tendremos una pijamada!_
_ ¡No…
Dejó de escuchar a su amigo pues llamó su atención una caja que se encontraba justo frente a la puerta de su suite.

Arturo la había llamado, pidiendo que fuera con urgencia a la suite de Fernández, no sabía por qué pero fue lo más rápido que le fue posible. Se encontraba atravesando el estacionamiento del Royal, a la mayor velocidad posible.
_ ¡Cuidado, roba autos!_ exclamó un chico que le resultaba familiar
Lo miro con atención, esa piel morena, esa sonrisa y esa increíble habilidad para conducir. Era claro de quien se trataba.
_ ¡Lobo!_ exclamó sorprendida
_ Antes eras más hábil esquivando autos_ bromeó
_ Antes los desarmaba_ dijo con una sonrisa _ ¿Qué haces aquí… Y hablando así? _ cuestionó
_ El señor Fernández dice que si quiero esta chamba debo mejorar mi vocabulario_
_ Vas muy bien con eso… ¿Cómo es que llegaste aquí?... Es decir, la última vez que te vi ibas llegando al pueblo con ese pequeño niño…
Hizo una pausa en lo que las piezas se acomodaban en su cabeza.
_ ¡Ese niño era el enano!_ exclamó _ Ahora entiendo todo_
_ ¿Todo bien, Kía?_ los interrumpió Chaim
_ Si, todo excelente… es solo un reencuentro entre amigos_
_ Me encantó verte de nuevo, ladrona_ le guiñó el ojo
_ ¿De dónde se conocen?_ cuestionó el príncipe
_ Del pasado_ concluyó _ Los veo luego_ se despidió

Se encontraban reunidos en la sala de la suite, observando con atención la caja que se encontraba sobre la mesa de centro. Era grande y tenía escrito en uno de los costados: “Para los siete de Garcés (Kía, Arturo, Emilia, Oscar, Paula, Martín y Lucía)”.
_ ¿Por qué no me incluyó a mí?_ cuestionó Julián
_ Chicos, es obvio que la caja fue enviada por Garcés_ comentó Mau
_ No creo que debamos abrirla_ dijo Paula
_  ¿Sabías algo de esto, Flor?_ preguntó Mauricio a su novia
Ella negó con la cabeza, aunque ciertamente tenía una ligera idea de lo que ocurría.
_ La abriré_
Mau levantó la tapa de la caja y sacó un sobre del interior.
_ Es para ti_ le dijo a Paula, entregándole el sobre
Pau abrió el sobre con lentitud.
_ Es el número y la dirección del almirante_
_ Este es tuyo, Kía_
Otro sobre.
_ ¿Boletos de avión?_ cuestionó
_ ¿Qué es esto?_ preguntó Arturo  
_ Un sobre_ respondió Martín con obviedad
_ ¡Ya sé que es un sobre!, Me refiero, ¿Por qué?, ¿Qué significa?_
_ Es… ¿Una ofrenda de paz?_ dijo Emi con confusión
_ ¡Es el disco de mis padres!_ exclamó Oscar sacando un cd de un sobre con su nombre y el de su hermana
_ Agus me había comentado que quería darles algo para disculparse_ comentó Flor

Se había vuelto ya una costumbre el reunirse en el salón real y conversar tiradas en el piso con las cabezas juntas, formando una especie de circulo. Ella no dejaba de mirar esos cuatro boletos de avión, tenían destino a la playa, la misma a la que sus padres le habían contado que planearon viajar justo antes de que ella fuera robada.
_ Si yo estuviera en tu lugar, me iría sin pensarlo_ comentó Sara
_ Es solo que no me siento a gusto sabiendo quien compró estos boletos_ respondió
_ Kía, eso es pasado y si tienes la oportunidad de recuperar un viaje familiar, no veo porque no tomarlo_ insistió su amiga
_ Estoy de acuerdo con Sara_ secundó Candela
_ Bueno… igual les quería hablar de algo más… de un chico_ anunció _ Pero será en otra ocasión, debo marcharme_
_ ¡No!, ¡No puedes irte y dejarnos con la intriga!_ exclamó Cande
_ Ya sé… Hagamos una pijamada y así nos cuentas todo_ propuso Sara
_ De acuerdo, pero que sea en mi casa… Pasamos mucho tiempo en el Royal, ¿No creen?_

Se encontraba sentado sobre su cama, observando con detenimiento ese papel. España. Madrid, España para ser exactos. Ese era el último sitio en al que su padre había viajado antes de morir. ¿Era ahí donde se encontraba su media hermana?, ¿Había una viuda de Campos en ese lugar?
Quería averiguarlo, pero no sabía cómo.
_ ¿Todo bien, Tincho?_ preguntó Oscar acercándose a él
_ No lo sé_ respondió _ ¿Crees que está información sea real?_
_ El cd de mis padres es original, pero lo tuyo es diferente_
_ ¿De verdad crees que sea una ofrenda de paz?_ cuestionó
_ No tengo idea… quizá… solo sé que aun así no lo puedo perdonar_ confesó
_ Ni yo_
_ Prepara tus cosas_ le indicó Lucía entrando a la habitación
_ ¿Para qué?_ preguntó Oscar
_ ¡Tú no!, ¡Tincho!... ¡Benja nos invitó a una pijamada en su suite!_ anunció emocionada _ Ya le dije a Mau que iremos… Y creo que también estará Nadia_ explicó _ ¡Date prisa!_

Era una carta. Una carta de su padre, probablemente la última que escribió antes de morir. ¿Cómo la había conseguido?... Le daba miedo abrirla. Desde los seis años no recibía una carta suya.
_ ¿No piensas abrirla?_ preguntó Ezequiel entrando a su habitación
_ No por ahora_ respondió
_ Amm… Emi, Oscar y Paula vendrán a quedarse hoy a la suite_ informó con cierto temor
_ ¿Te volviste loco?_ exclamó _ ¡No puedes invitar a nadie aquí!... ¿Cómo vamos a ocultar la ausencia de mi madre?_
_ Emi insistió en venir… creo que sospecha algo_
_ ¡Y ahora lo confirmará!... ¿A qué hora vendrán?_
_ En cuarenta minutos_
_ Bien, vayamos a buscar al idiota de tu hermano y armemos un plan_ dijo poniéndose de pie y olvidando por completo la carta de su padre, al menos por el momento.

Desde la ruptura jamás había tenido que preocuparse, Kía seguía poniendo resistencia, pero sabía que tarde o temprano volverían a estar juntos. O al menos eso pensaba hasta esa tarde, cuando vio a Kía hablar con su compañero, supo que había peligro. 
_ ¿Quieres hacer algo esta noche?_ preguntó a El lobo
_ ¿Me hablas a mí?_ cuestionó el chico moreno
_ Si, llevas algunos días trabajando conmigo y no te conozco mucho… solo quiero convivir un poco_ explicó
_ Bien, ¿Vamos por unas chelas?_
_ ¿Qué?_
_ Cerveza, ¿Vamos por unas?_
_ Si, supongo_ respondió

Después del caos de la tarde con la “ofrenda de paz”, parecía que todo había vuelto a su ritmo normal y acelerado en la suite, con los chicos corriendo de un lado a otro.
_ Dile a los padres de Kía que me llamen cuando estés en su casa_ indicó a su prima
_ Relájate, tenemos 17_ respondió Sara
_ Eso es lo que me preocupa_
_ Mañana el señor Ochoa nos llevará a la escuela_ comentó Lucía
_ ¿Se van?_ preguntó Flor entrando a la suite
_ Al parecer todos se van de pijamada_ dijo _ Quedaremos solos_ le susurró al oído
_ No lo creo, Julián verá hoy a su hermano_ respondió _ ¿Me acompañas?_

_ Claro, lo que más quiero esta noche es ver a Garcés_ comentó con sarcasmo 

No hay comentarios:

Publicar un comentario