martes, 15 de agosto de 2017

Capítulo 108: EL DESFILE

_ ¿Qué cosa?_
_ Yo también tengo una familia grande, cinco hijos… y yo soy el quinto_ comentó
_ Soy la cuarta… creo, o quinta si contamos a todos_
_ Entonces eres la de en medio, la olvidada_
_ ¿Olvidada?_
_ Mi hermano Teo es el tercero, mis padres están tan ocupados con los mayores y los dos más jóvenes que se olvidan por completo de él, ¿No te pasa lo mismo?_
_ No_ respondió, aunque esa idea quedó en su cabeza durante un rato.

Solo media hora antes del desfile se encontraban todos reunidos detrás de la  pasarela, algunos nerviosos y otros más bien ansiosos.
_ ¿Así estoy bien?_ preguntó Emi mostrando su atuendo
_ Te ves hermosa_ respondió con una sonrisa _ ¿Podrían ayudarme con los chicos?_ dijo señalando a Tincho y Arturo quienes batallaban para colocarse sus chaquetas
_ Ya vamos_ dijo Sara entre risas
_ Mamá_ la interrumpió Julián tocando su brazo
_ ¿Qué ocurre, enano?_
_ No encuentro a Agus, ¿Le indicaste bien la fecha y hora?_ cuestionó
Esa punzada nuevamente, llevaba ya cuatro días escondiéndole la verdad a su hijo.
_ Quizá está ocupado en el trabajo_ explicó
_ O quizá ya no me quiere_ dijo con tristeza
_ No, no, hijo. Enano, Agus te quiere, es solo que está un poco ocupado_
_ ¡No!, ¡Hace días que no lo veo!, ¿Por qué?... ¿Por qué no va a casa?_ insistió el pequeño
_ Flor, ¿Ya está todo listo?_ preguntó su jefa _ ¿Está todo bien aquí?_
_ ¡Yo no salgo hasta que venga Agus!_ exclamó Julián alejándose
_ Tengo un pequeño conflicto con mi hijo_ respondió a su jefa
_ Quizá pueda ayudarte, mi novio tiene un niño de su edad y quizá me sirva de experiencia_ explicó
_ No creo, es un asunto que no creo que otro niño de su edad pase por lo mismo_ dijo corriendo detrás del pequeño
Sabía que no podía ocultarle más la verdad, pero tampoco podía contarle todo en ese preciso momento. No quería que sufriera y no tenía idea de cómo protegerlo.
_ Enano, escucha_ exclamó deteniéndolo del brazo _ Agus no puede venir hoy_
_ ¿Ya no me quiere?_ cuestionó con tristeza
_ Hijo, él te quiere. Solo que está ocupado con el trabajo. ¿Vamos?... Te ves muy guapo como para no salir a esa pasarela_
Julián sonrió ligeramente. Ella lo abrazó y lo tomó de la mano para dirigirse a la pasarela.

Se encontraba sentado frente a la pasarela, le parecía extraño haber sido invitado al evento, pero quería aprovechar cualquier oportunidad para acercarse a los chicos. Hasta el momento había tratado ligeramente a Martín y a los mellizos.
_ Entonces… ¿Flor y tú se separaron y ella decidió adoptar al más pequeño de los chicos?_ preguntó tratando de entender la historia que Fernández le contaba
_ Si, creo que al principio solo quería molestarme, pero después se encariñó de él y es una excelente madre con él y con el resto de los chicos_
Asintió.
_ ¿Qué edad tienen los mellizos?_
_ Trece. En verdad, señor Palacios, vaya con calma. Ellos son un poco desconfiados y necesitan cautela_
Asintió tratando de comprender esas palabras.

El desfile había sido todo un éxito, los diseños de Flor habían causado fascinación y estaban listos para salir al mercado la siguiente temporada.
_ ¿Podría hablar contigo un momento?_ preguntó uno de los fotógrafos
_ ¡Claro que si!_ exclamó Paula con emoción
_ No, me refería a ti_ dijo señalándola
_ ¿A mí?_
_ Si, ¿Cuál es tu nombre?_
_ Sara Montero_ respondió
_ Serías una excelente modelo. ¿Te interesaría una sesión fotográfica?_ propuso _ Llámame_ dijo entregándole una tarjeta

Los chicos seguían emocionados por el éxito obtenido. Ahora cenaban todos juntos en la suite, incluyendo al señor Palacios.
_ Es hora de ir a dormir, chicos_ indicó Mauricio
_ Es muy temprano_ se quejó Paula
_ Tú no, los enanos_ respondió
_ ¡Ya escucharon, enanos: A dormir!_ exclamó Martín
_ Eso te incluye a ti_
Martín se cruzó de brazos, enfadado y se levantó de la mesa.
_ Yo los acompaño_ se ofreció el señor Palacios siguiendo al niño
_ Nosotros debemos irnos_ comentó Arturo observando a Ezequiel
_ Dile a tu madre que mañana iré a buscarla_ dijo Mauricio
_ Si. Le diré_
Arturo y Ezequiel se marcharon.
_ Iremos a ver una película_ dijo Oscar
Los mellizos y Paula se retiraron a la sala.
_ El señor Palacios parece muy entusiasmado con los chicos_ comentó
_ Si, ¿Crees que podríamos hablar en el pasillo, o en mi oficina?_ preguntó Mau
Se pusieron de pie y abandonaron la suite. Siempre el pasillo parecía un lugar con más privacidad que el interior.
_ ¿Qué ocurre?_
_ El señor Palacios quiere adoptar a uno de los chicos_ explicó _ Por eso es que quiere acercarse a ellos de manera tan desesperada_
_ ¿Cómo estás con eso?... Enloqueciste cuando adopte a Julián_ sonrió
_ Lo sé… me costó separarme del enano, pero aún lo sigo viendo. Si el señor Palacios adopta a uno de ellos, se lo llevará lejos… apenas puedo sobrellevar que Julián viva a seis manzanas de distancia_
_ Debo decirle a Julián_ confesó _ ¿Me ayudarías a contarle mañana?_

Era casi la media noche y se encontraba parado en mitad del pasillo platicando con Olivia, ahora que estaba de regreso en su vida, le agradaba verla y conversar con ella.
_ Empiezas mañana_ comentó la chica de rubio cabello
_ Te agradezco mucho_ respondió
_ No hay de que, me encanta ayudarte… aunque no me quieras contar que pasa. ¿Por qué diablos necesitas un empleo?_
_ Es complicado_
_ Los asuntos complicados son ideales para hablarlos con tu ex_
Sonrió. Ella seguía siendo tan elocuente como siempre
_ Eso no es verdad_
_ Pero tal vez puedas hablarlo con una amiga_ sonrió
_ ¿Tienes tiempo?_
_ Para ti, seguro_

A la mañana siguiente despertó a la hora acostumbrada, se levantó y comenzó a preparar el desayuno. Un poco de jugo y unos huevos revueltos con jamón.
Antes de adoptar a Julián, nunca cocinaba el desayuno, solía comprarlo de camino al trabajo, pero ese pequeño había cambiado su mundo por completo.
_ ¡Enano!, ¡A desayunar!_ gritó
Generalmente obtenía un adormilado “ya voy” por parte de su hijo, pero esta vez no hubo nada.
_ Julián, se enfría la comida_ insistió colocando el plato sobre la mesa
Nuevamente solo obtuvo silencio.
_ Julián, debemos ver a Mau y a los chicos en una hora_ comentó entrando al cuarto del niño.

La habitación estaba vacía. Julián había escapado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario